S8. Actividad 1: Integración y redacción del informe final
Introducción
La siguiente
redacción será del dilema que afecta la cultura integra de México: la lectura.
Esta actividad
que se lleva más allá, donde se relaciona la imaginación y el razonamiento.
Jugando con nuestros ideales y convicciones, del cual nos distrae de todo
pensamiento, siendo leales al contenido de cada libro. Los pensamientos más
nobles de cada autor se plasman en una sola pieza, donde recabe todo entorno
que se quiera implantar, lleva a una transcendencia cognitiva de las palabras,
y estimula partes del genio que caracteriza a cada individuo.
El hecho aquí, es
que la gente huye de esto, siendo que se podría progresar desde uno mismo y
proyectarse como un ser desarrollado, pero en sí, no se percatan de la
inversión que deberían hacerse a sí mismos. La lectura que brinda conocimientos
descubiertos o inventados pero que tienen el fin de juguetear con la razón;
sobre que hemisferio cerebral le tendrá afecto esa información.
La gente de México,
su pueblo, no lee, y esto ha llevado a la ignorancia que de ahí prosigue a
actos innobles y desfavorables. Más que nada, al estímulo de productividad, porque a todos nos motiva
algo; el objetivo es encontrarlo, ¡y la lectura trae el mundo a sus manos!
Aquí analizo el
campo laboral de una librería donde emprendí una jornada que duro 3 meses,
observando con atención los detalles de día a día, los hábitos de lectura de
las personas, sus preferencias literarias o científicas, etc. Teniendo pláticas
amenas con algunos, y con otros obtenía datos interesantes de los libros.
Investigación de
campo
Decidí
tomar como campo de estudio el lugar donde trabajo: una librería situada en el
centro de la ciudad, donde está todo el bullicio.
Llego
a las 2 de la tarde, donde empiezo a sacar mesas para retacarlas de libros
sobre un mantel de rojo carmesí para prepararlos para la venta. Después busco
otros quehaceres, como desenterrar libros en un almacén junto al lado,
considerando títulos que puedan llamar la atención e interés a los clientes.
Este
ámbito de trabajo está en ubicado al lado de una gran catedral, donde aparte
hay dos librerías continuas de donde yo me ubico, donde infinidad de gente pasa
y donde un tráfico increíble abunda de automóviles y autobuses. En este sitio
se encuentran diferentes clases sociales como: trabajadores de diferentes
empresas y diferentes jerarquías, vagabundos, clase media, baja y hasta cierto
momento, alta. Llega hasta el más aventurero y mundano. Hasta el más malandro.
También se encuentran transeúntes camino a sus destinos.
Además,
siempre hay oportunidad de socializar, ya sean pláticas leves o temas en
específico. He mantenido conversaciones sobre profesiones, viajes, personas y
más que nada, de libros. Los libros abren nuevas puertas, nuevo vocabulario y
nuevas ideas.
Es
un entorno prejuicioso (respecto a las otras librerías); las alianzas entre
compañeros de negocios son condicionales, se mantienen a flote por estar en el
mismo lugar de trabajo, pero la envidia reside en sus mentes por quien vende
más. Aunque mi jefe es de mente desinteresada por aprovecharse del negocio.
Gente
de cada calidad viene en busca de un libro que lo conecte, que tenga esa
electricidad psíquica de cada autor.
Respecto
a la delincuencia, aquí está a flor de piel la malicia y los prejuicios en
contra, no se puede confiar en cada individuo, a menos de tratarlos y conocer
sus intenciones; en la mayoría son inocentes, mas no faltan quienes indican
sospecha de querer robar. Pese a estas aclaraciones, es un ameno lugar de
trabajo al aire libre, donde te relacionas, conoces de todo tipo de libros de
diferentes temas y épocas.
En
los lugares derredores, hay música vibrando en cada oído. Venden comida, desde
sushi hasta mexicana. Se escuchan los cláxones gritar y los frenos forzosos de
los automóviles, mientras se da el servicio al cliente en el negocio. De vez y
en buena suerte, llegan muchachas de bien parecido a comprar libros, donde se
llevan literatura y mi corazón envuelto en su celular.
En la noche, al momento
de mi retirada, se abren bares alrededor con música de distintos géneros, con
música en vivo, que dura hasta la madrugada, se cierran los demás negocios y
empiezan a residir los vagos buscando donde dormir. En fin, después de mí, el
trabajo es del velador, que tiene problemas igual que un policía local.
Investigación
documental
El objetivo primordial de
este informe sobre Lectura, es generar información
estadística más reciente,
sobre el comportamiento lector de la
población mexicana, en este caso tomo a partir de 18 años y más, considerando
características de la práctica de la lectura, aspectos asociados con la misma
y razones principales para la no lectura.
El promedio de libros
leídos por la población de 18 años y más en el último año fue de 3.8
ejemplares. En comparación, en Chile se leen 5.4 libros al año; en Argentina el
promedio es de 4.6; en Colombia de 4.1, y en Brasil de 4 libros por año de
acuerdo a “El Libro en Cifras, boletín estadístico del libro en Iberoamérica”,
del Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe.
Los informantes dijeron
que la razón principal para leer libros y revistas es por “entretenimiento”
(40.2 y 60.5%, respectivamente), mientras que quienes leen periódicos lo
asocian a su interés por la “cultura general o por estar al día (63 por
ciento)”. En promedio, la población entrevistada dedica 38 minutos a la lectura
por sesión continua. El tiempo de lectura aumenta conforme se eleva el nivel de
escolaridad. De ahí que quienes tienen al menos un grado de educación superior,
dedican a esta actividad 49 minutos por sesión, mientras que las personas sin
educación básica terminada registran un tiempo promedio de 28 minutos.
Características
de la práctica de la lectura de la población de 18 años y más
De la población de 18
años y más, 97.2% es alfabeta, de ésta población 80.8% leyó en el último año
por lo menos alguno de los materiales considerados por: libros, revistas,
periódicos, historietas o páginas de Internet, foros o blogs.
Considerando a la
población de 18 años y más alfabeta, se tiene que de cada cien personas 47
leyeron algún periódico en la semana pasada de referencia; asimismo, de cada
cien, 46 declararon leer al menos un libro en los últimos doce meses; con una
frecuencia ligeramente menor se encuentra la lectura de revistas en los últimos
tres meses (42 de cada cien); las páginas de Internet, foros o blogs se leen
por 37 de cada cien de esta población y en una reducida proporción se
encuentran quienes leen historietas.
Resultado de este
levantamiento se observó que en febrero de 2016, los varones declararon en un
61% haber leído al menos un periódico la semana pasada, muy superior a lo
declarado por las mujeres (33.6 por ciento). En cuanto a la lectura de libros,
48.2% de las mujeres declararon que en los últimos doce meses leyeron algún
libro, para los varones representa 5 puntos porcentuales menos. Con relación a
la lectura de revistas en los últimos tres meses, 43.2% de las mujeres
declararon la lectura de ese material contra un 39.7% de los hombres. La
lectura actual de páginas de Internet, foros o blogs, así como de historietas
es mayor por parte de los varones que de las mujeres.
La lectura y el
impacto tecnológico
Por otra parte, a pesar
del incremento en el uso de las tecnologías de la información, se observa una
gran diferencia entre la población de 18 años y más lectora de libros, revistas
o periódicos que prefieren leer en formato impreso.
El motivo principal por
el cual se realiza la lectura de libros y revistas es por “entretenimiento”
(40.2 y 60.5%, respectivamente), mientras que la lectura de periódicos se
asocia más al interés por la “cultura general”.
Aspectos
asociados a la práctica de lectura de la población de 18 años y más alfabeta: La
estimulación
Respecto a estímulos en
el hogar durante la infancia para la práctica de la lectura, casi 60% de la
población de 18 años y más alfabeta declaró haber tenido libros diferentes a
los de texto en casa; poco más de la mitad veía a sus padres leer; menos del
25% de la población declaró que hubo fomento para la asistencia a bibliotecas o
librerías; y solamente a un tercio de esta población les leían sus padres o
tutores.
De la población que
declaró que le leían sus padres o tutores durante la infancia, se identifica
que en mayor proporción la lectura la realizaba la madre, (64.9 por ciento).
Conclusión
Al tener presente todo el
proceso de investigación, los resultados no fueron tan favorables, porque me
enfoco a los que si leen, pero sigue habiendo una alta tasa en contra de los
que no.
Bien se dice que México
no progresara significativamente si no se culturaliza la lectura como estilo de
vida. Es decir, es lo más sano para la cordura y preparación. En si, es un
pilar demasiado grande para que las reformas que se plantean para la educación
puedan funcionar. A grandes rasgos es lo más viable, es decir, que la población
tendría un criterio crítico para poder educar y combatir con los males de la
ignorancia. Apunto que la ignorancia ataca la plena conciencia de la realidad,
que de ahí perjudica al bien común. Una persona educada, tiende a ser más
perspicaz contra la corrupción y los malos tratos. Es un medio que influye más
profundo que el internet o la televisión. Porque desarrolla pensamientos a un
nivel más puro y elevado.
La esencia del hombre
puede purificarse juntando los pensamientos, ideas, hechos y hazañas más nobles
de científicos, filósofos, matemáticos, y otros grandes personajes de la
historia, que marcaron con pies de gigante a la civilización.
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